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Alternativas a Ozempic: ¿Es Mounjaro la Nueva Revolución en Pérdida de Peso?

Escrito por: Alfredo Andreu

Farmacéutico y dietista-nutricionista (Nº Colegiado ARA00404)

En el mundo de los medicamentos para la pérdida de peso, un nuevo nombre puede superar a Ozempic: Mounjaro. Pero, ¿cuántas alternativas hay a Ozempic? ¿Son mejores? ¿Hay más medicamentos antiobesidad además de Mounjaro en el horizonte? Bien, pues en este artículo doy respuesta a esas cuestiones.
Qué te cuento en este artículo:

Como farmacéutico y nutricionista quise responder esas preguntas sobre Mounjaro y otras alternativas a Ozmepic. Mis pacientes me preguntaban por todo ello y quise que tuvieran una información clara y práctica. Gracias a esta investigación, he descubierto muchas sorpresas en estos nuevos medicamentos para el manejo del peso que están teniendo una demanda sin precedentes. Sígueme en este viaje para encontrar la verdad entre tanto ruido.

El Problema del Peso y del Hambre

Muchos profesionales de la salud dedeñan estos medicamentos antiobesidad. Pero muchas personas los reciben con los brazos abiertos. Fíjate en este caso. Oprah Winfrey no presentaba un programa hace mucho tiempo. No le hace falta. Sin embargo, esta mujer presentó este programa porque, a pesar de haber logrado casi todo en la vida, manejar su peso era su bestia negra. Esa tarea que siempre la derrotaba. Esa tarea imposible.

Conviene leer entre líneas de estos sucesos porque leyendo entre líneas podemos meternos realmente en la cabeza de alguien para quien el peso ha sido toda la vida una batalla perdida. El alivio que han supuesto estos medicamentos, o mejor diré la liberación que han traído a sus vidas, es lo que veo detrás de ese programa.

Hasta ahora han surgido medicamentos como Ozempic o, hablando de su caso concreto, Mounjaro. El título del programa no deja lugar a dudas sobre su contenido: “Vergüenza, culpa y la revolución de la pérdida de peso”.

No sé si hay otra persona cuya lucha contra su peso haya sido tan seguida y explotada como la mía. Durante 25 años, burlarse de mi peso fue el deporte nacional. Quería hacer este especial para las más de 100 millones de personas en EE UU y para las 1.000 millones en el mundo que sufren obesidad. Quizá eres tú o quizá alguien a quien amas.

— Oprah Winfrey
Mounjaro alternativa Ozempic

Fíjate qué palabras usa Oprah: vergüenza, culpa, burla, lucha, sufren… No estamos hablando del lanzamiento de un nuevo smartphone. No hablamos de una nueva plataforma de streaming. Hablamos de una nueva “píldora mágica”, como la denomina el aclamado periodista Johann Hari en su último libro, Magic Pill.

Estas nuevas píldoras mágicas a las que hace referencia Hari no son otras que los medicamentos para perder peso. Seamos sinceros: estos nuevos tratamientos, que no llevan más de dos años entre nosotros con esta indicación, son polémicos. Muchos profesionales de la salud los están recibiendo con escepticismo o, incluso, rechazo. Sin embargo, no se dan cuenta del tremendo impacto que está teniendo en muchas personas y un ejemplo claro es Oprah.

¿Por qué vuelve a presentar un programa si no lo necesita? ¿Por qué aparece emocionada, con la voz quebrada, haciendo el que ha sido el programa más personal de toda su carrera? ¿Por qué utiliza las desgarradoras palabras que utiliza?

Por la rabia. Por la incomunicación. Por la falta de comprensión que, como ella, viven muchas personas que han sido derrotadas toda su vida por el tema del peso. Personas que, como Oprah, han sentido que podían con todo… menos con el manejo de su peso.

Al verla presentar, entendí de qué clase de emociones estábamos hablando y todo lo que había en juego. Y entonces, no me cupo duda de qué momento estamos viviendo. Un experimento farmacocultural emocionante.

No me refiero a quien hace la “operación bikini”, si no a gente a la que le sobran 50Kg y le esperan años de hambre, privaciones, ansiedad, tristeza y todo lo que la sensación de hambre física conlleva. Quien nunca ha tenido que vivir pasando hambre para estar en su peso subestima lo mucho que traumatiza y lo mucho que el cuerpo se “venga”

La Revolución de Mounjaro Como Alternativa a Ozempic

Bien. Creo que aclarado este contexto podemos afirmar que sí, que estamos frente a toda una revolución porque, como toda revolución, sacude lo previamente establecido con un nuevo mundo que lo sustituye.

La primera generación de esa revolución fueron Ozempic o Saxenda (pérdidas de peso de un 15 % en seis meses), y ahora viene la segunda generación, como Mounjaro (pérdidas de un 21 %) o, incluso, los de tercera generación (pérdidas de un 24 % del peso corporal).

Pero antes, si queremos saber quién puede usar estas alternativas a Ozempic y hasta qué punto pueden solucionar el problema del exceso de peso, debemos entender primero de dónde vienen.

Mismos Medicamentos, Nueva Indicación

Imagina un frondoso bosque donde vive una experta boticaria llamada Lara. Ella, conocida por su habilidad para curar males con brebajes extraídos de la naturaleza, se propuso un día encontrar un remedio para la fatiga que afligía a los aldeanos durante los largos y sombríos inviernos. Durante semanas, mezcló esencias de raíces y hojas caídas, esperando dar con la poción revitalizante perfecta.

Y Lara lo consiguió. Como he dicho, Lara era una experta…

Lo que pasa es que el descubrimiento no se quedó ahí. Resulta que la gente a la que le había dado a probar el jarabe notó algo inesperado. Algo mejor. Aunque el brebaje aliviaba la fatiga como esperaba, los aldeanos que lo probaban regresaban con historias de cómo sus dolores de cabeza crónicos habían desaparecido como por arte de magia. Y, a ver, no quiero echar por tierra la intención original de Lara: aumentar la energía está muy bien. Pero aliviar el dolor de cabeza crónico, un dolor para el que los aldeanos no tenían solución, es una bomba. Una revolución. Bravo por Lara.

Y Lara, asombrada y complacida, comenzó a distribuir su accidental descubrimiento. La poción, nacida con el propósito de aumentar la energía, también había demostrado quitar el dolor de cabeza.

La Promesa de Mounjaro

He querido contarte esta historia por una razón. El descubrimiento de Lara refleja la serendipia que, a menudo, se encuentra en la investigación científica. Los investigadores suelen desarrollar un medicamento con un objetivo específico, solo para descubrir más tarde que posee propiedades beneficiosas inesperadas para otros problemas.

Así, al igual que la poción de Lara, algunos fármacos revelan sus secretos más valiosos mucho después de su creación inicial. El caso de la semaglutida, que después de 18 años siendo usada por los diabéticos tipo 2, se convierte en un fármaco para perder peso.

Ahora volvamos del mundo de Lara a nuestro mundo. Aquí no contábamos con una solución tan eficaz contra la obesidad como la cirugía. Estos nuevos fármacos antiobesidad, descubiertos por serendipia, están logrando equipararse en eficacia a la cirugía. Y no es necesario explicar qué diferencia hay entre inyectarse uno mismo un medicamento por vía subcutánea (un pinchazo en el abdomen) a someterse a una cirugía.

Es decir, ha aparecido algo más fácil de aplicar y casi igual de eficaz. De hecho, medicamentos como Mounjaro han logrado igualar las cifras de reducción de peso que se logran con cirugía tradicionalmente.

A diferencia de Ozempic, que fue de los primeros medicamentos en llegar y que se hicieron muy conocidas porque consiguieron pérdidas de peso hasta un 15 %, con Mounjaro se llegan a un 21 %.

¿Por Qué Funcionan en la Pérdida de Peso?

Éstas moléculas tienen una estructura muy parecida a unas hormonas que nuestro cuerpo es capaz de producir de forma natural cuando comemos. ¿De qué hormonas hablamos fundamentalmente? Pues son GLP-1 (péptido similar al glucagón tipo 1) y GIP (péptido insulinotrópico dependiente de glucosa).

Recuerda que las hormonas son como mensajeros especiales que el cuerpo usa para comunicarse con diferentes partes de sí mismo. Estas hormonas se producen en el intestino, que es el tubo por donde pasa la comida después de que la masticas y tragas. Desde ahí, viajan a otras partes del cuerpo para decirles qué hacer. Por ejemplo, le dicen al páncreas (una parte de tu cuerpo que ayuda a digerir la comida y controlar el azúcar en la sangre) que necesita trabajar para mantener la glucemia justo como debe ser, ni muy alta ni muy baja.

Ahora entiendes por qué esta molécula es parte de una clase de fármacos llamados agonistas del receptor de GLP-1. Porque lo que hacen es imitar o actuar como el GLP-1 natural que produce tu cuerpo, pero con algunas ventajas añadidas.

¿Qué ventajas? Pues que a diferencia que la GLP-1 natural, estos fármacos están diseñados para durar más tiempo en el cuerpo. Ojo, esto es importante también. El GLP-1 natural se descompone muy rápidamente. Sin embargo, medicamentos como la semaglutida están modificados para que no se descompongan tan rápido, lo que permite que tengan un efecto más prolongado.

De hecho, esa fue una de las mayores razones por las que se empezaron a prescribir para personas con diabetes tipo 2, porque no dependen de la ingestión de alimentos para activarse y pueden proporcionar un control más constante de los niveles de glucosa en la sangre.

Resultado: Perder Peso

Pero ahora volvamos al principio de esta sección. ¿Recuerdas la historia de serendipia de Lara? ¿Qué otro efecto descubrieron que tenían estos fármacos como la semaglutida? Correcto: un efecto saciante. Es decir, además de un efecto reductor en los niveles de azúcar en sangre, estos receptores están también en estómago y cerebro. ¿Cómo actúan en esos sitios? Pues, en ambos casos, reduciendo el apetito.

Y como ya hemos dicho que la semaglutida tarda más tiempo en descomponerse que la hormona natural, el efecto saciante (reducción del apetito) dura más. Consecuencia: menos ingesta de comida. Menos probabilidad de sucumbir a ciertos antojos hipercalóricos. Resultado: pérdida de peso corporal.

Por tanto, lo que tenemos es el mismo fármaco de antes (semaglutida o liraglutida) investigado para diabetes, pero con una nueva indicación a raíz de conocer su efecto saciante: tratar el sobrepeso y la obesidad.

Ahora viene una aclaración porque estamos usando muchos nombres técnicos, lo sé. Pero es fácil. Mira, cuando hablamos de semaglutida, hablamos del nombre científico del fármaco. El nombre comercial del medicamento es Ozempic y es el más conocido de esta categoría de tratamientos porque es el que con más éxito se ha usado hasta la fecha. Es la primera generación de estos fármacos.

Pero, ¿qué pasa con la segunda generación?

¿Qué es Mounjaro?

Tras la semaglutida y la liraglutida llegó una nueva incorporación a la familia, la tirzepatida. De nuevo, ese es el nombre científico. ¿Nombre comercial del medicamento? Lo has adivinado: Mounjaro. Esta molécula, además de ser estructuralmente similar a GLP-1, también lo es de GIP. Es decir, a diferencia de Ozempic, que solo activa un receptor hormonal (GLP-1), Mounjaro activa dos receptores hormonales (GLP-1 y GIP).

La FDA aprobó su uso como fármaco para perder peso en noviembre de 2023. Sin embargo, la compañía que lo produce rebautizó a este fármaco con un nuevo nombre cuando se use con este nuevo fin. Es decir, el nombre de Mounjaro se queda para cuando se prescriba para diabetes y Zepbound para cuando se prescriba para adultos con obesidad o exceso de peso y problemas relacionados con ello.

Como recuerda su ficha técnica, este es un medicamento que necesita receta médica, sí afecta a la conducción y que necesita un seguimiento. Y a diferencia del mal uso que se ha promovido en redes sociales como TikTok, donde hemos visto usar este tipo de medicamentos con un fin puramente estético en personas que no cumplían criterios, Mounjaro (o Zepbound) no debe usarse para la pérdida cosmética de peso.

¿Cómo Puede Mounjaro Revolucionar la Pérdida de Peso?

La ventaja frente a Ozempic es que el fármaco es más potente al tener efecto sobre el receptor de GLP-1 y GIP. Como resultado, se consigue perder más peso. En este estudio se ha observado hasta un 21 % de reducción de peso, e incluso más.

¿Puede considerarse esto una revolución? Ya lo creo. Es una revolución porque la cirugía bariátrica, que decíamos que era la solución más eficaz que había hasta la fecha, conseguía reducciones de aproximadamente 25-30 %. En otras palabras, prácticamente hemos alcanzado las mismas cifras de eficacia que la cirugía con un tratamiento que evita pasar por quirófano.

Esto explica la demanda sin precedentes que tienes este tipo de fármacos. Algunas alternativas a Ozempic, como Mounjaro, ya han salido al mercado y otras están a punto de salir. Para que te hagas una idea de la magnitud de la demanda, te dejo este dato que analiza la consultora Axios: se calcula que a lo largo de la próxima década el 7% de la población estadounidense —24 millones de personas— podrían estar ingiriendo fármacos para la obesidad. Más impactante es este otro dato: el 42 % de los americanos ha reconocido en una encuesta que quiere tomar el fármaco. Que sienten esa necesidad.

Comparativa de Eficacia, Precios y Disponibilidad en el Mercado

La idea de esta sección no es promover el uso de un medicamento frente a otro, sino responder a la pregunta de cuánta pérdida de peso se ha demostrado en ensayos clínicos de uno y otro medicamento.

Una aclaración importante es que los resultados que te voy a compartir son los resultados oficiales de los ensayos que han sido promovidos por la compañía productora de ambos medicamentos. Eso puede despertar una duda: ¿no tienen esos ensayos un conflicto de interés detrás? Sí, lo tienen. Sin embargo, han sido aprobados por las autoridades reguladoras como la FDA.

A día de hoy estos son los únicos ensayos clínicos oficiales que tenemos evaluando la eficacia de estos medicamentos tan novedosos. Por eso lo comparto. Para tener un dato que responda a esa pregunta. Por favor, ten encuenta todo el contexto que proporciona el resto del artículo para que ninguno de estos datos, por muy prometedores que te parezcan, te hagan dejar de ver que empezar con un medicamento debe ser un proceso basado en el balance de los beneficios y de los riesgos.

Comparación de Eficacia: Mounjaro versus Ozempic

Pacientes sin diabetes pero con un IMC de ≥30, o ≥27 con comorbilidades, perdieron un promedio del 21% de su peso corporal (-21.8 kg) en un ensayo clínico de 72 semanas que evaluó 15 mg de tirzepatida (Mounjaro), cuando se combinó con una dieta reducida en calorías y un aumento de la actividad física.

Pacientes sin diabetes pero con un IMC de ≥30, o ≥27 con comorbilidades, perdieron un promedio del 15% de su peso corporal (-15.2 kg) en un ensayo clínico de 68 semanas que evaluó 2.4 mg de semaglutida (Ozempic y Wegovy), cuando se combinó con una dieta reducida en calorías y un aumento de la actividad física.

Costes y Dónde Comprar Mounjaro y Ozempic

Mounjaro ya está disponible comercialmente en EEUU, pero en otros países todavía no. En EEUU tiene un precio que oscila en torno a los 1.000 dólares al mes, igual que Ozempic. Los mismos medicamentos, Mounjaro y Ozempic, pueden adquirirse por sólo 155 dólares al mes en Canadá, 59 dólares en Alemania o menos de 140 dólares en España.

Por eso, debido a su alto coste en EEUU, allí es común ver modelos de plataformas (webs) directas al consumidor (Direct-to-Consumer, DTC) que no vemos en otros países. Estas plataformas permiten a los pacientes obtener acceso a medicamentos, incluidos los nuevos tratamientos para la obesidad, sin la necesidad de visitar físicamente una clínica o un hospital.

Estos modelos DTC han sido especialmente útiles para el tratamiento de condiciones que pueden ser estigmatizantes o difíciles de discutir en persona, como la salud mental, problemas sexuales, pérdida de peso, entre otros.

Si el médico determina que el paciente puede beneficiarse de un medicamento específico, emitirá una prescripción electrónica que se envía directamente a una farmacia. La farmacia luego puede enviar el medicamento directamente al domicilio del paciente.

Este modelo favorece un menor coste al medicamento. Algunas plataformas funcionan con un modelo de suscripción, donde los pacientes pagan una tarifa mensual que cubre la consulta, la prescripción y, a veces, una parte del coste del medicamento.

¿Qué problema podría haber? Pues que también han surgido preocupaciones relacionadas con la seguridad del paciente, la calidad del cuidado, y la regulación de estas prácticas, lo cual ha llevado a debates sobre cómo se deberían regular estos servicios para asegurar que los pacientes reciban una atención segura y efectiva. Si quieres saber más, te dejo esta entrevista en donde el doctor Ilya Golovaty habla de los potenciales beneficios y riesgos de este modelo DTC.

Efectos Secundarios de Mounjaro Frente a Ozempic

Aunque Mounjaro ofrece beneficios prometedores, es crucial conocer sus efectos secundarios. Este segmento compara los efectos adversos reportados de Mounjaro con los de Ozempic, proporcionando una perspectiva equilibrada para tomar una decisión informada.

En estudios con ratas, todos estos tratamientos, ya sea Ozempic o Mounjaro, ocasionaron algún caso de tumor de tiroides, incluyendo cáncer de tiroides. Sin embargo, aunque las ratas son el animal con el que más estudios se hacen, es normal ver este tipo de efectos adversos al investigar con fármacos.

Se desconoce si en humanos ocasionarán casos de tumores de tiroides o un tipo de cáncer de tiroides llamado carcinoma medular de tiroides (CMT), pero no parece probable por lo que sabemos hasta ahora. Su ficha técnica advierte de que no conviene usarlos si tú o un familiar han tenido CMT o si tienes una condición del sistema endocrino llamada síndrome de Neoplasia Endocrina Múltiple tipo 2 (NEM 2).

Experiencias y Testimonios de Usuarios

Nada habla más claro que las experiencias reales de quienes han usado estos medicamentos. Pronto enlazaré aquí testimonios y opiniones de usuarios que han probado tanto Mounjaro como Ozempic, brindando una visión de primera mano sobre su efectividad y manejo de efectos secundarios.

Alternativas a Mounjaro y Ozempic: Más Fáciles de Administrar y Más Accesibles

¿Y si en lugar de inyectarse, estos medicamentos se pudieran tomar por la boca? Sería fantástico…

Mientras estaba llevando a cabo la investigación para este artículo, me crucé con esta entrevista. Te la resumo, la investigadora Elena Murcia, del Grupo de Investigación en Bioinformática Estructural y Computación de Alto Rendimiento (BIO-HPC) y de la Unidad de Investigación de Trastornos de la Alimentación en la Universidad Católica de Murcia (UCAM), explica algo que me abrió los ojos sobre la dificultad de lograrlo.

La mayoría de los GLP-1 son péptidos, es decir, cadenas cortas de aminoácidos que pueden ser degradadas por las enzimas estomacales, motivo por el cual es más eficaz usarlos en vía inyectable que en vía oral», dice la investigadora.

Entonces, si la vía oral se va a hacer esperar, ¿qué nuevos horizontes tenemos por delante?

Alternativas Mejores que Ozempic

Aunque es posible que la vía oral se alargue, lo más probable es que las investigaciones logren salvar esa limitación y en el medio plazo veamos la aparición de tratamientos contra la obesidad orales. Mientras tanto, todo lo que tenemos es la vía subcutánea. Veamos qué alternativas existen a Ozempic ahora mismo y otros avances científicos recientes.

  1. Mounjaro (tirzepatida): Esta es la opción inyectable que analizo en este artículo y que logra mayores pérdidas de peso que Ozempic. Como ya hemos dicho, se llama Zepbound cuando está indicado para la pérdida de peso.
  2. Wegovy (semaglutida): Mismo principio activo o fármaco que Ozempic, pero es una versión de dosis más alta de Ozempic aprobada para la pérdida de peso en adultos y adolescentes de 12 años o más.
  3. Rybelsus (semaglutida): Rybelsus es una forma oral de semaglutida, el mismo compuesto activo en Ozempic, y se utiliza para gestionar los niveles de azúcar en sangre en adultos con diabetes tipo 2. Sin embargo, se Ozempic se impuso a Rybelsus en su elección para la pérdida de peso porque el fármaco inyectado dura más en el cuerpo que cuando es tomado oralmente. Así, el efecto saciante dura casi una semana completa.
  4. Trulicity (dulaglutida): Al igual que Ozempic, Trulicity es un agonista del receptor de péptido similar al glucagón-1 (GLP-1) utilizado para el tratamiento de la diabetes tipo 2. Hasta ahora, Trulicity no ha sido aprobado `pr ninguna autoridad sanitaria para la pérdida de peso.
  5. Victoza (liraglutida): Similar a Ozempic, Victoza es otro agonista del receptor de GLP-1 utilizado para el tratamiento de la diabetes tipo 2. La versión de este fármaco —liraglutida— aprobada específicamente para la pérdida de peso es Saxenda.
  6. Retratuida: está siendo estudiada. En este caso, no es con doble efecto, sino con triple efecto. Por tanto, este fármaco pertenecería a los medicamentos para perder peso de tercera generación.
  7. Bimagrumab: es un anticuerpo monoclonal. Es decir, presenta una estrcutura diferente a los anteriores. Combinar esta molécula con otros fármacos que ya hemos visto, tiene el potencial de reducir la masa grasa y, al mismo tiempo, mantener la masa muscular. Veremos hasta qué punto esto es verdad, pero sería una gran noticia ya que ese es uno de los retos cuando se pierde peso de forma rápida. Dejo claro de antemano que esto no significa que podamos olvidarnos de hacer ejercicio físico. La inmensa mayoría de los beneficios del ejercicio solo pueden conseguirse entrenando. El hecho de que un nuevo fármaco logre evitar tanta pérdida de masa muscular no significa que debemos dejar de trabajar nuestros músculos.
  8. Compuestos Naturales. No se han difundido todavía muchos detalles, pero un grupo de investigadores españoles han logrado identificar dos compuestos de origen natural (extractos de plantas) que lograrían el mismo efecto que Ozempic, pero por vía oral. ¿Cómo han logrado encontrar estos compuestos que no se degradan al consumirse por la boca? Pues en parte ha sido gracias al uso de Inteligencia Artificial como parte del proceso. Sin duda es prometedor. Veremos.

Como ves, a día de hoy, tan solo están aprobados para la pérdida de peso los medicamentos inyectables Wegovy, Saxenda y Zepbound (cuando se usa para diabetes tipo 2 se llama Mounjaro). El resto o están únicamente aprobados para diabetes tipo 2 o están en estudio.

Más Allá del Peso

Es evidente que una bajada de peso supone un cambio físico. Lo que no es tan evidente, pero sí es más importante, es la disminución en el riesgo de enfermedad y mortalidad. Y, por supuesto, la mejora en la calidad de vida.

Por eso no es de extrañar que hayan aparecido nuevos artículos científicos centrados en la mejora en la calidad de vida del paciente y no tanto en el porcentaje de bajada de peso que consiguen estos fármacos.

En concreto me refiero a este artículo llevado a cabo por distintos investigadores de varias universidades de prestigio, que hallaron un alto potencial en Mounjaro (tirzepatida) para reducir e incluso curar una de las enfermedades más molestas asociadas al sobrepeso y obesidad: la apnea obstructiva del sueño (AOS).

Conclusiones de Mounjaro

Hace años se estrenó una película visionaria. No es muy conocida, pero sorprende que sea de 2002 por la actualidad de su historia. La película se titula Simone y narra la ficticia historia de un director de cine, interpretado por Al Pacino, quien, para salvar su carrera del fracaso, crea por medio de un programa informático a Simone: una actriz virtual perfecta, sin defectos.

Ella da vida al personaje protagonista de sus películas y manipula a un público que acepta como real una increíble mentira informática. «Aunque no sea nada más que un conjunto de píxeles, la gente se irá enamorado de ella. Pertenecemos una cultura obsesionada por las celebridades», dice Andrew Niccol, el director de la película.

Hay un momento de la película en que Simone canta el estribillo de una canción de Aretha Franklin “me haces sentir como una mujer de verdad”. Quizá ahí está el dilema. ¿Qué queremos que nos reconozca como persona: nuestra apariencia o lo que verdaderamente somos?

Evaluando Tus Opciones

Nos han convencido, entre películas y redes sociales, de que solo los hermosos triunfan, de que solo los guapos son amados, algo que, francamente, muchas veces comienza en nosotros mismos, cuando juzgamos instintivamente a nuestros semejantes por su apariencia.

¿A dónde voy con esto? Pues a que los beneficios en la reducción del peso que pueden conseguirse con estos fármacos podrían cambiar la vida de muchas personas. Dicho esto, si hacemos un uso banal de ellos, estaremos actuando como el personaje de Al Pacino en Simone.

Otro comportamiento que he percibido y que tampoco nos conduce a algo bueno: “¿ha salido un nuevo fármaco mejor que los anteriores? Tengo que probarlo.” Es decir, en el caso de los medicamentos no podemos actuar como si fueran el último modelo del móvil. No olvidemos que los medicamentos son metabolizados por nuestro cuerpo. Es fundamental que el médico valore cada caso y analice si alguien es buen candidato a usarlos en función de su historia clínica y de sus antecedentes.

¿Cómo Puedes Actuar a Partir de Aquí?

Una vez dicho esto, ¿cómo puedes usar la información de este artículo? Veamos. Si en tu país está aprobado Mounjaro o Zepbound, ve a hablar con tu médico con toda esta información y pregúntale: ¿puedo usar Mounjaro o Zepbound?

Si cumples criterios y Mounjaro o Zepbound está disponible (lo tienen en las farmacias de tu zona y el precio es asequible), sí, puede ser mejor alternativa que Ozempic. En cualquier caso, recuerda que siempre debes comenzar con la menor dosis posible para tu peso de inicio.

La doble activación hormonal que promueve Mounjaro frente a la activación simple de Ozempic lo hace, a priori, mejor candidato en términos de eficacia. Pero la experiencia nos dice que dos personas no reaccionan de la misma manera al mismo medicamento. Hay personas que con Mounjaro pueden no notar efectos significativos, ni siquiera ajustando la dosis. Lo mismo con Ozempic.

Por ejemplo, el caso de una persona que haya estado inyectándose distintas dosis de Ozempic (0,25 mg el primer mes, 0,5 mg el segundo y 1 mg el tercero) y no haya notado una pérdida de peso de más del 5 % en 3 meses, podría considerar con su médico el cambio a Mounjaro o Zepbound.

Espero que hayas encontrado útil este artículo. Mi objetivo era mostrarte las alternativas a Ozempic con Mounjaro a la cabeza, por sus semejanzas y por su importante diferencia. Sé que todo esto es muy técnico y puede abrumar por su complejidad. Pero no tienes nada que temer. Ahora ya dispones de toda la información que necesitas, rigurosa y estructurada, para hablar con tu médico y poder tomar una decisión compartida mejor.

*Alfredo Andreu es farmacéutico colegiado 3228 (ficha) y dietista-nutricionista colegiado ARA00404 (ficha)

Preguntas Frecuentes

¿Qué es lo más parecido al Ozempic?

España ha autorizado la prescripción de Wegovy a partir del 1 de mayo de 2024. El fármaco es el mismo que Ozempic, pero presenta diferentes dosis y tiene aprobación específica para la pérdida de peso en ciertas personas.

¿Qué otra medicina tiene el mismo efecto que Ozempic?

Actualmente, medicamentos inyectables u orales que tienen el mismo efecto que Ozempic son Mounjaro (Zepound), Wegovy, Saxenda, Rybelsus, Truclity y Victoza. No todos ellos están aprobados para lo mismo. Para la pérdida de peso solo están aprobados los medicamentos inyectables Wegovy, Saxenda y Zepbound (cuando se usa para diabetes tipo 2 se llama Mounjaro).

¿Qué es mejor: Ozempic o Trulicity?

Trulicity no está aprobado para la pérdida de peso, sino para la diabetes tipo 2. Sin embargo, al igual que Ozempic, se ha usado para esta indicación mientras se aprobaban nuevos medicamentos específicos contra el exceso de peso. En un estudio donde se comparó Ozempic con Trulicity se observó un control del azúcar en sangre más estable en el tiempo con Ozempic. Sin embargo, para la pérdida de peso no hay estudios, pero Ozempic ha sido más usado que Trulicity.

¿Qué adelgaza más: Ozempic o Saxenda?

Con Saxenda, la pérdida de peso estimada en 3 meses es de entre 3,7 y 7.5 kg. Con el uso de Ozempic se espera una pérdida de entre 7,5 y 11,2 kg. Son datos promedios de los ensayos clínicos. Además, hay que tener muy en cuenta la diferente administración de cada uno. Ozempic se inyecta una vez a la semana, mientras que Saxenda es una inyección diaria.

¿Es lo mismo Mounjaro que Zepbound?

Sí, ambos son nombres comerciales distintos que contienen el mismo fármaco: tirzepatida. La FDA aprobó el uso como fármaco para perder peso de Mounjaro en noviembre de 2023. Sin embargo, la compañía que lo produce rebautizó a este fármaco con un nuevo nombre, Zepbound, cuando se use con este nuevo fin. Es decir, el nombre de Mounjaro se queda para cuando se prescriba para diabetes y Zepbound para cuando se prescriba para adultos con obesidad o exceso de peso y problemas relacionados con ello.

¿Qué es Contrave?

Contrave combina dos medicamentos, uno es bupropión (que generalmente se usa para la depresión y para dejar de fumar) y el otro es naltrexona (usado comúnmente en el tratamiento de adicciones). La combinación ayuda a controlar el apetito y puede influir en las partes del cerebro que hacen que la comida sea gratificante, reduciendo así el deseo de comer en exceso.

¿Qué es Fentermina?

La fentermina es un supresor del apetito que actúa aumentando la liberación de ciertos neurotransmisores que reducen la sensación de hambre. Es un estimulante (similar a una anfetamina) y generalmente se prescribe para uso a corto plazo.

¿Qué es Qsymia?

Qsymia es una combinación de fentermina y topiramato. El topiramato se usa originalmente para tratar las convulsiones y prevenir migrañas, pero también puede ayudar a perder peso al hacer que te sientas lleno y te mantenga sin hambre durante más tiempo.

Medicamentos Para Perder Peso y Embarazo

Si estás intentando quedarte embarazada, no es recomendable usar ninguno de estos medicamentos para perder peso con la evidencia que disponemos a día de hoy. Se recomienda que dejes de tomarlos, al menos, dos meses antes de tratar de quedarte embarazada. Y, durante el embarazo, ninguno de estos medicamentos debe tomarse. Si lo estás tomando se debe suspender. Esto es aplicable a todos los medicamentos para perder peso: Ozmepic, Wegovy, Saxenda o Victoza, Mounjaro o Zepbound.

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